30 diciembre 2023

PROMESA INCUMPLIDA.


    Yo nací en 1965, actualmente tengo 58 años de edad.  Mis recuerdos son flashazos, frases y escenas cortas, no recuerdo bien los antecedentes ni lo que pasó después.  Es que la memoria, según me dijo alguna vez mi compañero, consiste en un cúmulo de impresiones emocionales.

   A mí me gustaba estar con niños más pequeños, era la amigota de los chiquitos, con ellos jugaba e, incluso, recuerdo que había una vecina, a quien mi mamá se refería como  “la señora chiquita”,  que me pedía cuidara a su bebé cuando ella iba a bañarse o salir.  Desafortunadamente, el recuerdo del nombre de la señora y el de la bebé no están presentes en mi mente.

    Vivíamos en la Unidad Kennedy y en el departamento 8 había una familia con varios hijos hombres, pues “buscaban a la niña”, según decía el jefe de la familia.  Los hijos eran Pepe, Javier, Alejandro, Ricardo y no recuerdo el nombre del otro niño.  Creo que yo tendría 5 o 6 años.

   Cuando Ricardo era bebé, el papá salía con el niño a tomar el sol, se sentaba frente al edificio, en un bloque que hay en la parte posterior de las construcciones y sirven para que las personas se acomoden para descansar. 

   Bueno, pues yo salí y me senté al lado del padre y el bebé, no recuerdo lo que platiqué con el señor pero sí que me preguntó si quería quedarme con el niño.  Por supuesto, respondí afirmativamente y me dirigí a mi casa, para informar a mi mamá que nos darían a Ricardo y que debíamos tener todo listo para recibirlo. 

   Recuerdo que mi mamá me dijo que el señor me había engañado, que había hecho una broma y que los hijos no se regalan.   Yo no quise aceptar lo expresado por mi madre y quedé en espera del vecino y Ricardo, que nunca llegó.



1 comentario:

  1. Tú y yo nos teníamos que conocer mi mamá en esas fechas también vivió en la unidad Kennedy. Tu sonrisa es igualita

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